Fiesta tras fiesta Paterna intenta volver a la normalidad casi sin conseguirlo, pues en abril sigue la fiesta que paraliza muchas de las actividades cotidianas de la administración con puentes u horarios diferentes, sin hablar del casi medio mes que los niños y no tan niños y profesores tienen de fiesta escolar, que hace más difícil todavía conciliar la vida laboral y familiar. Vacaciones que también hace que la vida política se paralice, que no se pare, a pesar de que queda tan solo algo más de mes y medio para las elecciones que mucha gente espera. Unos para ver el resultado y otros para seguir o cambiar a nuestros gobernantes.

Paterna en Semana Santa ha vuelto a ser la ciudad dormitorio que sigue siendo, y las calles han notado el largo puente en cuanto a número de vecinos y de coches, haciendo las delicias de los que se han quedado al salir también de la rutina de tener que aguantar los ruidos de los vecinos o poder aparcar a cualquier hora casi en la puerta de tu casa. También se ha notado en los servicios de limpieza, administrativos, seguridad, etc. Pero como hemos dicho al principio, volveremos a la normalidad en cuanto pasen las fiestas y nosotros estaremos aquí para informaros.